Reseña de “Un detective accidental en Donostia”

Reseña de “Un detective accidental en Donostia”

Michael Featherstone nos presenta, con la editorial Adarve, una obra de misterio diferente, entretenida y muy interesante. En esta reseña de Un detective accidental en Donostia trataré la figura del autor, la sinopsis, la temática principal y, finalmente, una serie de cuestiones que me parecen de vital importancia.

Michael Featherstone es un escritor que vive en Nueva York. Sin embargo, habla español perfectamente y desde que era pequeño, pues parte de su familia es panameña-colombiana. Su inspiración está en España. Además, es un hombre que ha viajado y recorrido el mundo durante mucho tiempo. España le gusta y, tras escribir varias obras en inglés, ha decidido presentarnos Un detective accidental en Donostia.

La estructura de la obra no es muy innovadora: un joven, Michael Llewellyn, debe estudiar un caso de un par de muerte es en Barrio Viejo de Donostia. Cuando empieza a adentrarse en este caso se sorprende con todo lo que hay detrás: problemas con el turismo, racismo, el sentimiento de propiedad de la tierra… Este libro, realmente, presenta un problema bastante actual, aunque en la actualidad está bastante callado. Sin embargo, ¿hasta qué punto está bien investigar si tu vida está en juego?

Esta obra, a grandes rasgos, habla sobre los conflictos que trae el turismo a las personas autóctonas. Hay personas (o personajes en esta ficción) que están a favor de este, pues consideran que trae mucho positivo, pero otros no están conformes. Sientes que solo ensucian y entorpecen la convivencia de los vecinos. Este puede ser un debate infinito y para el que yo no tengo una opinión consolidada. No obstante, no creo que este debate sea importante para la reseña de Un detective accidental en Donostia.

A la hora de leer esta novela nos encontramos con muchos aspectos positivos. En primer lugar, los personajes están perfectamente construidos. Sí que es cierto que pueden caer en ser demasiado típicos —exceptuando el protagonista principal—. Sin embargo, no ha sido algo que me ha molestado especialmente.

En segundo lugar, desde el primer momento yo tenía claro que este «misterio» no iba a ser únicamente eso. Iba a haber mucho más comprometido, personalidades que esconden más y que estas muertes son, solamente, la punta del iceberg. Me ha gustado la forma en la que se ha desarrollado, aunque me hubiese gustado otro final. Pero esto no repercute en la calidad literaria, solo en mis propios sentimientos.

De hecho, la pluma usada por el autor engloba cierto dinamismo que hace la lectura fresca y ágil. Un tema así, que podría caer fácilmente en la política y en discursos de derechas o izquierdas, se mantiene al margen. Se agradece muchísimo.

Asimismo, aunque la forma de describir y de narrar no tiene grandes elucubraciones, es sencilla. Se entiende a la perfección. Quizás le demandaría algo más de «magia», algo más de «oscuridad» y, quizás, algo que quede en la imaginación. Pero esto ya sería afinar mucho, no entorpece la experiencia lectora.

En tercer lugar, siento que esta novela es recomendable. Se nota que tiene un trabajo detrás, tanto de investigación como de escritura. Así mismo, hay que ser valiente para presentar esta temática en un libro tal que así. No todo el mundo sería capaz de escribirlo. Recomendado, sí señor.

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