Reseña “La aventura de conocerme”

Si alguien me dijera que mezclar el género ensayístico con la ficción crearía una obra didáctica y, a la vez, entretenida, probablemente no lo me creería; sin embargo, Sol, la autora de La aventura de conocerme, lo ha conseguido.

Con Sara, la joven que pone en práctica todos los conocimientos expuestos, aprendemos a conocer nuestro cuerpo, cómo reacciona ante agentes externos y cómo podemos cuidarlo. La autora atiende hasta el más pequeño detalle, pero lo hace de forma que nos atrapa en el misterioso mundo del cuerpo humano.

Sol destruye los prejuicios, rompiendo así con la concepción maniquea que predomina en nosotros: ni unas cosas son tan buenas como pensamos ni otras tan malas; en su justa medida, nos pueden traer beneficio. Y Sol así lo expresa, nos enseña sobre alimentación, bienestar, belleza y muchos más elementos que nos afectan en nuestro día a día.

Pero, entonces, ¿qué pinta aquí la ficción y, más concretamente, Sara? ¡Pues muy fácil! Sara fue la que me subió al vagón de las emociones, con ella me identifiqué y comprendí muchos de los aspectos que aparecían en la teoría. Es inevitable simpatizar con la joven, porque se presenta desde su más tierna infancia, lo que a mí me hizo retroceder a mis más prontas experiencias, pues, inevitablemente, la vida sigue para todos casi de la misma forma. Con ella he sonreído y me he conmocionado.

Aunque Sol manifieste que no es una obra que tiene el objetivo de enseñar, yo recogí conocimientos que desconocía. Todo ello tiene una finalidad clara, que es la de aprender a escucharnos a nosotros mismos, a nuestro cuerpo, que es el que, al fin y al cabo, nos acompañará en nuestro viaje de la vida.

Os invito, curiosos lectores, a que os sumerjáis en estas páginas que no dejarán a nadie indiferente. A mí, personalmente, me ha servido para prestarme atención, comprenderme y saber qué es lo que necesita mi cuerpo en todo momento. ¡Vamos, aprended a conocer el vuestro!