La reseña de Adiós fantasmas de Nadie Terranova es realidad gracias a la caja literaria de Bookish de agosto. Nos llegó a todos hacia el día 21/22 de agosto y este libro se publica el 7 de septiembre, es decir, que hemos tenido dos semanas para leerlo. Descubrir una historia antes que todos los demás tampoco tiene mucha importancia, pero es algo íntimo, como si el escritor te estuviese escribiendo solo a ti, de forma individual. Es algo “mágico”.
Esta historia nos cuenta la historia de Ida, una joven que vive en Roma con su marido. Ella vuelve a Mesina con su madre, ya que tienen la intención de organizar su casa de la infancia. Tienen que tirar muchos recuerdos que no valen para nada, aunque guarden mucho valor sentimental. Toda esta situación se complica al tener que arreglar el techo de esta casa. Contratan a dos albañiles que trabajan mientras ellas ordenan. Los recuerdos van encendiéndose, van surgiendo como velas apagadas tras una tormenta: su padre desapareció cuando ella era pequeña. Guarda pocas cosas de él, pero todo vuelve. Se siente agobiada, como si todos esos fantasmas del pasado quisieran volver, pero no han tocado la puerta.
Siento que esta historia es perfecta para la época actual, donde necesitamos tranquilidad pero también intensidad en los sentimientos. Es más, comienza septiembre, se avecina el otoño, donde todo se tiende a apagar, donde los días se acortan y la melancolía de los días de verano vuelven. Por eso mismo, siento que Adiós fantasmas de Nadia Terranova es perfecta para esta estación, para este momento del año.
Sí que es cierto que os debo avisar que en esta novela no vais a encontrar mucha acción, ni personajes que se jueguen la vida por salvar a otros. Lo único que vais a encontrar es el atardecer de Italia, los reflexiones de una mujer que sufre por su padre desaparecido y por su marido encontrado, pero en la distancia. Encontramos las dudas que genera estar en una situación de bloqueo, donde no puedes avanzar, porque no tienes puntos de apoyo. Asistes al derrumbamiento de la infancia y del presente de Ida, pero también de su futuro más próximo.
No puedo terminar de realizar esta reseña de Adiós fantasmas sin mencionar una de las cuestiones que más interés han despertado en mí. La autora de esta historia no tiene grandes pretensiones, no quiere sorprender con una historia muy rebuscada. Nos ha sorprendido con la sencillez, con una historia muy real y veraz, donde los personajes respiran nuestro aire, donde los personajes lloran nuestras lágrimas. Siento que es una historia que solo sabrá disfrutar un grupo reducido de personas.